El "Carry Trade", punto frágil del nuevo esquema económico argentino
La implementación del nuevo régimen cambiario argentino ha desatado un intenso debate entre expertos y miembros del equipo económico sobre su sostenibilidad a largo plazo
La implementación del nuevo régimen cambiario argentino ha desatado un intenso debate entre expertos y miembros del equipo económico sobre su sostenibilidad a largo plazo. Mientras el gobierno insiste en que "esta vez es diferente", numerosos analistas advierten sobre vulnerabilidades estructurales que podrían comprometer el modelo, particularmente la estrategia basada en atraer inversiones especulativas de corto plazo.
Federico Furiase, Felipe Núñez y Martín Vauthier, considerados arquitectos intelectuales del plan económico, han intensificado su ofensiva comunicacional para defender el esquema. Su participación en medios tradicionales y plataformas digitales, incluido un nuevo programa en el canal Carajo junto al influencer Pablo Pazos, evidencia la determinación gubernamental por instalar la narrativa de que el actual esquema de banda cambiaria no terminará abruptamente como experiencias anteriores.
La principal crítica que enfrenta el modelo se centra en la dificultad del Banco Central para acumular reservas genuinas provenientes de inversiones productivas o exportaciones, a diferencia de los fondos prestados por organismos multilaterales. El ex ministro Hernán Lacunza, quien recientemente entró en la mira de las críticas presidenciales, advirtió sobre esta distinción clave: "No confundir reservas compradas con reservas prestadas. Lo primero es tierra firme: reservas a cambio de demanda voluntaria de pesos".
Esta preocupación adquiere mayor relevancia ante la reticencia de productores sojeros para liquidar sus tenencias y el persistente déficit de cuenta corriente que acumula ya diez meses consecutivos. Los datos comerciales del primer trimestre son particularmente alarmantes: sin considerar el sector energético, Argentina registraría un déficit de 1.112 millones de dólares, exponiendo fragilidades estructurales en su balanza comercial.
Contrariamente a las proyecciones oficiales, las importaciones no muestran signos de normalización tras el levantamiento de restricciones cambiarias. Informes del sector comercial indican un incremento en la llegada de productos chinos, mientras el turismo emisivo continúa drenando divisas a un ritmo que podría neutralizar los 8.000 millones de dólares que el gobierno espera ingresar por exportaciones energéticas.
"Argentina is tradable but not (yet?) investable", declaró Héctor Torres, ex representante argentino ante el FMI, citando la evaluación de un banco de inversión internacional. Esta frase, que podría traducirse como "Argentina es buena para hacer trading pero no para invertir", sintetiza el escepticismo sobre la capacidad del país para atraer capital genuino de largo plazo, diferenciándolo del especulativo carry trade.
El equipo económico rechaza enfáticamente las comparaciones con experiencias anteriores, particularmente con el régimen de banda cambiaria implementado en 2018 durante la gestión de Mauricio Macri con Guido Sandleris al frente del Banco Central. Aquel esquema, inicialmente exitoso en contener la volatilidad cuando el dólar se recostó contra el piso de la banda, terminó colapsando por presiones externas y la incertidumbre electoral.
Felipe Núñez, en una reciente discusión en redes sociales con el trader conocido como "Juancito Nieve", argumentó que las condiciones actuales son fundamentalmente diferentes. Según el funcionario, el ajuste fiscal ya se ha realizado, la posición técnica es favorable y existe menor incertidumbre política que en 2018. "Es todo lo opuesto a lo que sucede hoy: el ajuste ya lo hicimos por nuestra propia voluntad, la posición técnica es muy buena y la imagen del Javo es super sólida + la oposición es un desastre", sostuvo.
El argumento central del gobierno es que el actual modelo opera con una base monetaria fija, a diferencia del escenario de 2018 cuando aún se emitían pasivos remunerados. Además, señalan que el gasto público ha descendido del 45% al 34,5% del PIB, creando condiciones estructuralmente diferentes para la sostenibilidad del esquema.
Sin embargo, persisten interrogantes sobre si realmente existe una flotación cambiaria genuina. Gabriel Caamaño, analista económico, cuestiona la volatilidad observada desde la implementación del nuevo régimen: "Eso pasa cuando 'forzás' un régimen nuevo que recién arranca: corrés el riesgo de sumarle una volatilidad que de otro modo no hubiera tenido y condenarte a tener que seguir forzándolo para aplacarla".
El debate se extiende también a las condiciones óptimas para el carry trade. Mientras algunos especialistas argumentan que el plan fue diseñado para que el dólar se recueste sobre el piso de la banda debido a la entrada de inversores en busca de rentabilidad en un contexto de "escasez de pesos", otros sostienen que esta estrategia solo resulta viable cuando la cotización se aproxima al techo, minimizando el riesgo de volatilidad dentro del rango.
La experiencia de 2018 dejó lecciones valiosas sobre los límites de este tipo de esquemas. En aquel entonces, la diferencia del 25% entre el piso y el techo de la banda resultó excesivamente amplia, permitiendo fluctuaciones significativas sin que el Banco Central pudiera intervenir. Las concesiones posteriores del FMI, que permitieron licitaciones diarias de divisas y eventualmente la intervención discrecional en el mercado, evidenciaron las limitaciones del modelo original.
Para el corto plazo, existe cierto consenso respecto a que el Banco Central podrá cumplir con el objetivo de sumar 4.400 millones de dólares en reservas, aprovechando la estacionalidad de la liquidación agrícola. Sin embargo, las perspectivas se complican significativamente para el segundo semestre, cuando deberá afrontar vencimientos por 4.500 millones de dólares en julio.
"Nuestro argumento siempre fue que este modelo cierra con una apreciación del tipo de cambio", reconoció Núñez, confirmando que la estrategia gubernamental contempla deliberadamente una valorización del peso como componente estructural del plan económico. Esta visión, denominada "de las tres anclas", postula un cambio paradigmático en la economía argentina que hasta ahora no ha generado consenso entre analistas del mercado financiero.
La cuestión central que permanece sin respuesta concluyente es si las condiciones actuales permitirán sostener el modelo más allá del corto plazo o si, como en experiencias anteriores, terminará sucumbiendo ante presiones externas y desequilibrios estructurales de la economía argentina.
Te puede interesar
Banco Central revela estrategia monetaria post-unificación: la clave detrás del crédito privado y la acumulación de reservas
Federico Furiase, director del Banco Central (BCRA) y asesor cercano del ministro Luis Caputo, reveló los mecanismos técnicos que el equipo económico está aplicando para incrementar la liquidez en pesos sin generar presiones inflacionarias, un desafío que había resultado esquivo para administraciones anteriores
Meta de inflación de Milei choca con los compromisos de acumulación de reservas ante el FMI
La semana inicia con incertidumbre en los mercados globales mientras los analistas económicos argentinos detectan una posible desviación en la estrategia oficial respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional
El legado económico de Francisco: la visión de Guzmán y Stiglitz sobre justicia social y el próximo "Jubileo" global
La búsqueda de un sistema financiero internacional más equitativo ha encontrado en el pontificado de Francisco uno de sus más influyentes defensores, según revela un análisis conjunto publicado recientemente por dos figuras destacadas del panorama económico global
La encrucijada del tipo de cambio argentino: Impacto empresarial tras la flexibilización del cepo cambiario
La reciente modificación del régimen cambiario argentino ha generado un escenario de alta volatilidad que plantea interrogantes cruciales sobre la competitividad de las empresas nacionales
Economistas advierten que el dólar podría superar los $1.400 antes de fin de año, desafiando la estrategia oficial
La reciente volatilidad del mercado cambiario argentino ha puesto en jaque las proyecciones oficiales sobre la evolución del dólar, mientras un grupo significativo de consultoras anticipa que la divisa estadounidense podría romper el techo de la banda establecida por el gobierno en los próximos meses
Titanes tecnológicos enfrentan desafíos financieros por guerra arancelaria de Trump
La incertidumbre generada por las políticas comerciales de la administración Trump ha comenzado a sacudir los resultados financieros de los gigantes tecnológicos estadounidenses, encendiendo alarmas entre inversores que siguen de cerca la evolución de los CEDEARs vinculados a estas empresas
Bank of America cambia su proyección sobre el peso argentino tras la unificación cambiaria
La entidad financiera estadounidense, una de las más influyentes en Wall Street, publicó el 23 de abril un revelador informe titulado "Argentina: Stick it to the floor. Buy ARS"
China flexibiliza aranceles a bienes de EEUU en un posible giro de la guerra comercial
Las autoridades chinas han comenzado a flexibilizar aranceles a productos de EEUU, según confirmaron múltiples empresas afectadas, en lo que podría interpretarse como el primer indicio significativo de distensión en la guerra comercial
Milei defiende tendencia bajista del dólar en medio de repunte cambiario y desafíos en reservas
La cotización del dólar experimentó un incremento en todas sus variantes durante la segunda semana de implementación del nuevo esquema cambiario argentino, pero el presidente Javier Milei insiste en que la divisa norteamericana debería acercarse más al piso que al techo de la banda de flotación