¿La cantidad de pesos en circulación, crece o no? Analistas contradicen versión oficial
La consultora Econviews, dirigida por Miguel Kiguel, cuestiona la narrativa oficial sobre la ausencia de emisión monetaria
La economía argentina enfrenta un panorama complejo donde la expansión del dinero circulante supera significativamente los registros inflacionarios y la devaluación, generando interrogantes sobre la sostenibilidad del proceso desinflacionario y la estabilidad cambiaria. Los datos revelan una disparidad preocupante entre el crecimiento de la masa monetaria y su traslado a precios, mientras el gobierno de Javier Milei mantiene su compromiso con el equilibrio fiscal.
La situación monetaria presenta cifras que ameritan análisis detallado. Desde que Milei asumió la presidencia, la base monetaria convencional experimentó un incremento del 278,2%, escalando desde 10,1 billones de pesos el 7 de diciembre de 2023 hasta alcanzar 38,2 billones en la actualidad. Este crecimiento contrasta con la inflación acumulada del 214,6% durante el mismo lapso, dejando una brecha de aproximadamente 60 puntos porcentuales que podría explicar las dificultades para consolidar la desinflación.
El mercado cambiario refleja esta tensión monetaria con el dólar libre registrando un alza del 251,3%, pasando de 364,41 pesos a 1.280 pesos. La cotización alcanzó la franja de 1.300 pesos, representando el nivel más elevado desde la eliminación de los controles cambiarios. Esta evolución sugiere que la divisa estadounidense subió 27 puntos menos que la base monetaria, insinuando un margen adicional de presión alcista considerando estrictamente la oferta de dinero.
Las tasas de interés en pesos experimentaron movimientos abruptos en el mercado de cauciones, donde los préstamos de cortísimo plazo superaron el 100% nominal anual. Este fenómeno se vincula directamente con la liberación de aproximadamente 10 billones de pesos tras la eliminación de las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI), instrumentos que durante un año sirvieron para absorber excedentes monetarios.
La consultora Econviews, dirigida por Miguel Kiguel, cuestiona la narrativa oficial sobre la ausencia de emisión monetaria. El informe señala que mientras la base monetaria amplia permanecía estable, la base monetaria tradicional continuaba expandiéndose, impulsando el crecimiento crediticio y la remonetización económica. Esta diferenciación resulta crucial para comprender las presiones actuales sobre el sistema financiero.
El concepto de base monetaria amplia incluye, además de la versión tradicional, otros pasivos como depósitos gubernamentales y pasivos remunerados del Banco Central. Sin embargo, la dinámica que realmente impacta en los mercados está determinada por la base monetaria tradicional, compuesta por circulante, depósitos bancarios en el BCRA y cheques cancelatorios.
La circulación de dinero, componente principal de la base monetaria, registró un crecimiento del 260%, ascendiendo desde 6,6 billones hasta 23,8 billones de pesos. Este incremento supera en 45 puntos porcentuales a la inflación y en 9 puntos al dólar, evidenciando la magnitud del exceso de liquidez en el sistema.
El presidente Milei ha reiterado su posición doctrinaria sobre la naturaleza monetaria de la inflación, afirmando que este fenómeno surge invariablemente del exceso de oferta monetaria. Sin embargo, la realidad empírica muestra que el traslado de la expansión monetaria hacia los precios no es inmediato ni proporcional, generando desfases temporales que complican la gestión macroeconómica.
Salvador Di Stefano, analista económico, estima que la finalización de las LEFI movilizó entre 10 y 15 billones de pesos hacia las cauciones, reduciendo inicialmente las tasas pero generando posteriormente una espiral especulativa. Los agentes financieros tomaron deuda a tasas reducidas para comprar dólares, amplificando la presión cambiaria.
La consultora EcoGo advierte que el desarme de las LEFI añadió tensión cambiaria en momento electoral, cuando tradicionalmente la oferta de divisas se contrae. El gobierno respondió elevando las tasas de interés de corto plazo e interviniendo en la curva de futuros para contener la volatilidad cambiaria.
El Fondo Monetario Internacional reconoce la transición hacia un régimen monetario y cambiario más robusto, destacando el paso desde un tipo de cambio de paridad móvil hacia un sistema flexible con bandas relativamente amplias. No obstante, la institución subraya la necesidad de mantener políticas macroeconómicas restrictivas para lograr una balanza comercial sólida y acumular reservas.
Las expectativas inflacionarias para 2025, según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del BCRA, se ubican en 27% anual, cifra que refleja la persistencia de presiones inflacionarias pese a los esfuerzos gubernamentales. Esta proyección evidencia las dificultades para consolidar un proceso desinflacionario sostenible en el contexto actual.
El Banco Central había establecido en julio de 2024 un límite para la base monetaria amplia, tomando como referencia los 47,7 billones de pesos del 30 de abril de 2024, equivalentes a menos del 10% del PIB. La autoridad monetaria anticipaba que este techo permitiría transformar al peso en la "moneda escasa" una vez introducida la competencia de monedas.
La estrategia gubernamental mantiene como pilar fundamental el superávit fiscal, herramienta considerada esencial para romper la dinámica inflacionaria histórica. Sin embargo, los analistas coinciden en que el ancla fiscal, aunque necesaria, resulta insuficiente para controlar completamente las presiones monetarias y cambiarias en el corto plazo.
La situación actual presenta desafíos múltiples: mantener la credibilidad del programa antiinflacionario, evitar una aceleración cambiaria que erosione la competitividad y preservar la estabilidad financiera ante la liberación de excedentes monetarios. La gestión exitosa de estos equilibrios determinará la sostenibilidad del programa económico en los próximos meses, especialmente considerando que la economía mantiene un crecimiento del 5% interanual mientras busca consolidar la reducción inflacionaria por debajo del 2% mensual.
Te puede interesar
Deuda argentina: el Gobierno enfrenta vencimientos por USD 4.200 millones en enero y define su estrategia financiera
La colocación del Bonar 2029N marcó el regreso al financiamiento en dólares bajo legislación local. El Tesoro acelera compras de divisas y evalúa alternativas como privatizaciones y nuevas emisiones para afrontar compromisos de corto plazo
Reforma laboral: obras sociales sindicales perderían $90.000 millones por recorte de aportes patronales
La CGT calculó el impacto financiero de reducir las contribuciones empresariales del 6% al 5%. Las centrales obreras rompieron el diálogo con el Gobierno y convocaron a una movilización masiva. El peronismo prepara una estrategia para frenar el proyecto en la Cámara Alta
Argentina regresa al mercado de deuda en dólares: colocó USD 1.000 millones al 9,26% anual
El Gobierno concretó la primera emisión soberana en moneda extranjera desde 2018. La tasa superó las expectativas de Caputo, quien anticipaba un rendimiento inferior al 9%. El resultado genera lecturas encontradas entre los analistas del mercado financiero
Deuda mundial alcanza récord de USD 346 billones y el IIF anticipa un nuevo ciclo de endeudamiento
El Instituto de Finanzas Internacionales advierte que el stock global de pasivos creció USD 26 billones en nueve meses. Estados Unidos y China lideran la acumulación mientras sectores como inteligencia artificial y defensa transforman los mercados crediticios
Retenciones al campo: el Gobierno recorta alícuotas y resigna USD 600 millones de recaudación
La administración Milei redujo los derechos de exportación para soja, trigo y maíz de forma permanente. Los analistas anticipan mayor ingreso de divisas durante el verano pero advierten que el traslado a precios internos será limitado. El trigo lidera el potencial exportador con proyecciones récord
Argentina regresa al mercado de deuda en dólares: Caputo apunta a captar USD 1.000 millones
El Gobierno emite el Bonar 2029N este miércoles tras ocho años sin colocaciones en moneda extranjera. Nuevas medidas habilitan a aseguradoras a participar mediante cauciones bursátiles. El ministro de Economía fijó como objetivo una tasa inferior al 9% anual